Salud masculina

Los hombres tienden a calificar su salud mejor de lo que realmente es y a menudo se toman las dolencias físicas y mentales a la ligera. La atención preventiva no es su tema favorito. Es hora de que los hombres también empiecen a recapacitar.

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En las últimas décadas se han producido importantes cambios en el modelo masculino. Ahora los hombres se toman el permiso de maternidad como algo natural, empujan los carritos de bebé, se encargan del hogar y de los niños. Las expectativas sociales a la masculinidad de hoy en día son diversas: por un lado, el hombre debe tener capacidad para imponerse en el ámbito profesional, por otro, debe ser también un padre atento y un compañero afectuoso. Al menos hay algo sencillo que suele darse por hecho: el hombre puede reforzar su salud.

Prevención: cómo mantener la salud del hombre:

  • Una vez al día: 30 minutos de deporte y ejercicio
  • Una vez a la semana: Sexo y ternura
  • Una vez al mes: Autoexamen de los testículos
  • Una vez al año: Revisión con un urólogo

La salud de los hombres debe convertirse en un asunto de hombres

Cuando se trata de salud preventiva, los hombres tienden a ser más precavidos. Llevan regularmente su coche al taller para su mantenimiento, pero a menudo descuidan la revisión de su propia carrocería. Sólo cuando los primeros dolores llaman a la puerta, suelen empezar a ocuparse de su propio cuerpo o de su psique. La campaña benéfica Movember (palabra inventada a partir de bigote y noviembre) fue fundada en 1999 por un grupo de jóvenes australianos para despertar a los hombres. El uso visible del bigote durante el mes de noviembre tiene como objetivo crear una mayor conciencia sanitaria entre el sexo fuerte, así como generar donaciones en beneficio de la investigación y la prevención de los problemas de salud típicamente masculinos. 20 años después, la iniciativa se ha extendido por todo el mundo y sigue sin cansarse de conseguir que el sexo fuerte preste más atención a su salud. Al fin y al cabo, muchas enfermedades típicas y dolencias masculinas pueden nivelarse con una dieta adecuada y un estilo de vida saludable. También pertenecen a ella los exámenes preventivos tempranos.

Vitaminas y minerales para hombres

Los que se preocupan activamente por su cuerpo y su salud notarán rápidamente los cambios. Un hombre no tiene que cambiar todo su estilo de vida si quiere hacer algo bueno para sí mismo. Más bien, son los cambios pequeños pero regulares los que acaban dando sus frutos. Los micronutrientes pueden aportar una importante contribución en este sentido. Las vitaminas, los minerales o los extractos de plantas seleccionados proporcionan apoyo desde el interior y pueden acompañar a los hombres con sensatez en todas las situaciones de la vida.

Micronutrientes para hombres: nuestros consejos para un mayor rendimiento

Los hombres -al igual que las mujeres- llevan una vida cotidiana agotadora y llena de retos. La única diferencia es que los hombres no quieren admitir tan rápidamente esas exigencias excesivas o demasiado estrés. En la mayoría de los casos, esto ocurre mucho más tarde que en el caso de las mujeres, ya sea porque quieren ocuparse de los problemas ellos mismos o porque temen que esto pueda tener repercusiones en su trabajo. Por ello, es aún más importante armarse contra el estrés de la vida cotidiana apoyando el rendimiento mental y físico.

Además de una respiración consciente y sesiones de relajación (por ejemplo, ejercicios de respiración en el lugar de trabajo o paseos por el bosque), también debe prestar atención a lo que se come: porque si lo da todo día tras día, o incluso más, también necesita más. Sólo con cantidades suficientes de vitaminas y minerales nuestro cuerpo puede seguir siendo eficiente y soportar las exigencias diarias. Los preparados multiespectrales de alta calidad pueden contribuir al suministro diario de nutrientes y soportar posibles necesidades adicionales. En situaciones especialmente estresantes, los preparativos especiales hechos a medida también nos ayudan a seguir adelante. Entre ellos debe figurar el mineral antiestrés magnesio, que -solo o en combinación con las potentes vitaminas B2, B9 y B12- puede ayudar a reducir el cansancio y la fatiga.

Fertilidad: qué pueden hacer los hombres si quieren tener hijos

Son solo 20 centímetros y, sin embargo, es una de las competiciones más duras: esa es la distancia que tienen que recorrer los espermatozoides para alcanzar su ansiado objetivo: el óvulo. La probabilidad que tiene cada uno de crear una nueva vida es ínfima: menos de 1 entre 500 millones. No obstante, cuantos más espermatozoides haya y más vitalidad tengan, mayores serán las posibilidades de éxito. Las enfermedades o los defectos genéticos afectan a la calidad del esperma, pero lo que más influye es el estilo de vida. Determinados medicamentos (por ejemplo, antidepresivos o esteroides anabolizantes), una temperatura testicular excesiva (por ejemplo, por usar calefacciones de asiento, darse baños calientes, ponerse el portátil en el regazo), el estrés, la obesidad, el alcohol, el tabaco y una dieta poco saludable pueden afectar a los espermatozoides.

La buena noticia es que tú mismo puedes mejorar la calidad de tu esperma dejando de fumar, haciendo ejercicio moderado, siguiendo una dieta sana rica en nutrientes y, si tienes sobrepeso, adelgazando. Además de la vitamina B6, que favorece la actividad hormonal, y el selenio, que interviene en la formación de espermatozoides, el zinc, considerado un mineral especialmente importante para el hombre, desempeña un papel relevante en la fertilidad. El zinc contribuye a una fertilidad y reproducción normales. Es necesario para garantizar la copia correcta del código genético durante el proceso de formación del esperma. También garantiza que el código genético esté "bien empaquetado", lo que contribuye a prolongar la vida de los espermatozoides y a aumentar las probabilidades de fecundación y, por último, pero no por ello menos importante, a mantener unos niveles normales de testosterona en la sangre. Así que el zinc es sinónimo de fertilidad.

Los hombres y la testosterona

Ya a partir de los 40 años, la curva de energía del sexo masculino desciende. Sobre todo, los niveles de testosterona. La hormona sexual más importante en los hombres es la testosterona. Pertenece biológicamente al grupo de los andrógenos y se forma en los testículos.

Las razones de la disminución de la energía son la reducción de los músculos y la densidad ósea y el aumento de la grasa debido a la ralentización del metabolismo. Por supuesto, factores como el estrés, el tabaquismo y el alcohol, y la obesidad también influyen. Además de la disminución de los niveles de testosterona, que afecta a la libido, el estado de ánimo, el sueño y el impulso, hay una segunda hormona que impulsa el proceso de envejecimiento: DHEA.

El deporte influye positivamente en los niveles de testosterona y en el metabolismo. Ya sea en el gimnasio o al aire libre, el entrenamiento aeróbico con pesas favorece los huesos y promueve la salud.

Testosterona y próstata

La testosterona, el representante más conocido de los andrógenos, también participa en el crecimiento de la próstata. En la vida de un hombre, el agrandamiento de la próstata se produce tres veces: la primera como embrión, luego durante la pubertad y, finalmente, a partir de los 40 años. La testosterona desempeña un papel importante en los dos primeros. Por cierto, al nacer la glándula prostática pesa unos dos gramos, durante la pubertad el peso aumenta a unos 10 a 20 gramos y luego sigue creciendo lenta pero constantemente.

Micronutrientes para hombres: la importancia de la próstata

La salud sexual masculina no solo desempeña un papel esencial en la paternidad, sino también con la edad. Como los testículos, la próstata es un órgano propio de los hombres. Pero muchos solo tienen una vaga idea de su importancia, función o ubicación exacta. Cuando funciona con normalidad, esta glándula sexual, del tamaño de una castaña, realiza su trabajo de forma totalmente desapercibida y produce una secreción que constituye aproximadamente el 30 % de la eyaculación. La regula la testosterona, la hormona masculina.

Muchos hombres se preguntan cómo pueden mantener sanos y con vitalidad su cuerpo y sus órganos en la vejez. Haciendo honor al lema "A los cincuenta, uno tiene la cara que se merece" (según George Orwell) o "Tras los años de carga viene la carga de los años" (según Johann Wolfgang von Goethe), el estilo de vida desempeña un papel fundamental en el proceso de envejecimiento. Influye sobre todo el estrés oxidativo, que puede deberse a años de tabaquismo, toxinas ambientales o medicamentos, y que puede estar asociado a trastornos de la salud. Los micronutrientes antioxidantes como la vitamina E o el selenio pueden proteger las células del organismo de los radicales libres. Y el zinc, "el mineral del hombre", también es importante por su papel en los niveles de testosterona.

Quienes prefieran recurrir al poder de las plantas pueden cuidar su vejiga y su próstata con preparados combinados de hierbas que contengan extractos de serenoa y epilobio. El extracto de serenoa contribuye al mantenimiento de la función urinaria normal en hombres mayores de 45 años.

Salud y sexualidad de los hombres

La sexualidad también es un aspecto importante de la salud masculina. En muchos casos, este tema sigue siendo tabú y a menudo se apoya en hechos falsos. En los hombres, la sexualidad sólo se convierte en un problema cuando, por ejemplo, aparecen problemas de potencia o disfunción eréctil. Sin embargo, la vanidad masculina o las ideas erróneas suelen impedir que los hombres acudan al médico. Las causas de los problemas sexuales pueden ser de diferente naturaleza y deben ser discutidas con el médico

Micronutrientes para hombres: el pelo

La testosterona es la hormona sexual masculina dominante. Es la sustancia que hace que los hombres sean hombres. Pero esta hormona no actúa solo por debajo de la cintura. La testosterona también controla el vello corporal, entre otras cosas, y favorece su crecimiento y densidad... excepto el pelo de la cabeza. En este caso, la testosterona favorece la caída del cabello, pero solo si está determinado genéticamente. Cuanto antes cuiden los hombres su pelo, mejor. Además de productos tópicos, como tinturas o tónicos capilares, una dieta rica en nutrientes constituye la base de un cabello sano y fuerte. Somos lo que comemos, por lo que la salud y la vitalidad del cabello dependen esencialmente del aporte de nutrientes a los folículos pilosos. Los nutrientes llegan a la llamada papila pilosa a través de pequeños vasos. Esta papila se encarga de la formación de las nuevas células ciliadas, especialmente activas en la división. Los nutrientes adecuados —como el zinc, el selenio y la biotina— llegan a la raíz de los problemas de salud capilar y ayudan a mantener un cabello sano.

Los hombres inteligentes se cuidan

Ha llegado el momento de que los hombres tomen las riendas y no dejen su salud a su suerte. Lo mejor que puede hacer un hombre por su salud es mantenerse activo. Esto incluye (entre otras cosas) una dieta equilibrada, ejercicio regular y sesiones de relajación consciente, así como hacer vida social, hablar de los problemas y escuchar al cuerpo. Las vitaminas, los minerales y los extractos de plantas también son valiosos aliados, ya que aportan diversos beneficios a los hombres y constituyen la base para afrontar con éxito el estrés y otros desafíos de la vida.

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